
Sea como sea, si estás pensando en arrancar tu negocio desde casa, te explicamos qué cosas te conviene tener en cuenta.
Que trabajar desde casa mejora la productividad es un hecho a día de hoy incuestionable. Diferentes estudios cifran ese incremento entre un 20% y un 25%. La ausencia de desplazamientos, con la reducción de estrés, tiempo y costes que eso implica, permite focalizar mejor nuestra atención y mejorar nuestros rendimientos. Y aunque el grueso de los estudios hablan del teletrabajo (entendido en general por cuenta ajena), lo cierto es que, en lo que a calidad de vida laboral se refiere, los beneficios son perfectamente
extrapolables a la figura del emprendedor desde casa, el mal llamado emprendedor en pijama. Ahora bien, con ser una opción muy válida,
es cierto que no es igual de adecuada para todas las personalidades ni para todos los tipos de emprendedores. Requiere de un grado de autodisciplina y de una capacidad de organización importantes y de un tipo de emprendimiento muy vinculado a las nuevas tecnologías, que requiera de poca infraestructura física.
HABILIDADES
Tres son las habilidades claves que necesita tener todo aquel emprendedor que quiera arrancar el proyecto desde casa. Aunque son cualidades inherentes a la naturaleza emprendedora, lo cierto es que son más necesarias en este tipo de emprendimiento:
AUTODISCIPLINA
Si la autodisciplina es imprescindible siempre al emprender, cuando se trata de hacerlo desde casa todavía más porque las distracciones están en todas partes. Si es posible, habilita como despacho/oficina una zona o habitación donde puedas aislarte del resto de la casa para que los asuntos domésticos no interfieran en tu atención. E intenta establecer un horario de trabajo, de manera que evites cualquier impulso de ocuparte de cuestiones ajenas al proyecto durante ese horario.
Y viceversa. Si al emprendedor le cuesta de por sí desconectar de su proyecto fuera de la jornada, cuánto más cuando no existe separación física entre el negocio y el hogar. Para poder emprender desde casa es importantísimo saber desconectar. Si no el peligro del burnout es mucho más evidente.
CAPACIDAD DE ORGANIZACIÓN
Otro de los peligros en los que puedes incurrir si emprendes desde casa es “caer en la tentación de no ocuparte de aquellas tareas que te resulten más alejadas de tu core business, como la prospección o las tareas administrativas. Debes ser capaz de gestionar muy bien tu tiempo. Para ello, fíjate una agenda mensual, semanal y diaria donde incluir no sólo los objetivos de ventas, sino los calendarios de trámites o las acciones de prospección que has de llevar a cabo. Y también tienes que incluir en ella unos momentos para ti que te permitan, como hablábamos antes, desconectar un poco del trabajo. Uno de los peligros físicos de emprender desde casa está en el sedentarismo: la ausencia de desplazamientos puede reducir enormemente la actividad física, de manera que es importante incluir algún tipo de ejercicio diario: caminar, correr, hacer bicicleta, tenis, roller, natación… Procura incluirlo en tu agenda diaria.
TOLERANCIA A LA SOLEDAD
A la consustancial soledad en la cumbre del emprendedor, hay que añadir la soledad física del que trabaja desde casa donde el contacto con el exterior a veces se reduce al máximo. Debes aprender a vivir con ello y sacarle partido al componente extra de foco y tranquilidad que ganas con esta posición. Ahora bien, como recalca Carreras, “hoy en día es posible trabajar desde casa y tener relaciones laborales saludables”. Además de las herramientas digitales que te permiten la comunicación en remoto, que veremos más adelante, oblígate a salir y a relacionarte con otros emprendedores, no sólo por pura salud mental, sino para enriquecer tu proyecto.

Si estás convencido de poseer las habilidades necesarias para poder montar tu negocio desde casa, no está de más que tengas en cuenta
algunos otros aspectos.
FISCALIDAD Y LEGALIDAD
La figura jurídica que escojas para emprender es indiferente del espacio físico en el que desarrolles tu actividad, y recomendamos contatar o asesorarse con un profesional.
ORGANIZACIÓN
Gracias a las nuevas tecnologías hoy en día es posible crear toda una estructura empresarial en el que cada miembro del equipo
trabaje desde un punto de la ciudad o del planeta.
COMUNICACIÓN
Si en algo coinciden todos los expertos, es en que trabajar a distancia exige un sentido de la responsabilidad y del compromiso especiales, lo que implica seleccionar colaboradores que tengan las mismas inquietudes. Eso al final, te da la opción de trabajar con el mejor talento esté donde esté, sin limitaciones a un espacio físico. Ahora bien, tienes que poder comunicarte no sólo con esos colaboradores externos en cualquier momento sino también con tus clientes y partners. Y de nuevo la tecnología se pone al servicio del emprendedor en pijama. Son muchas las opciones y de nuevo las hay gratuitas y de pago.
LOGÍSTICA
Como comentábamos al principio, emprender desde casa no es una opción válida para todo tipo de emprendimientos y una de las excepciones más evidentes puede venir precisamente de la necesidad de un stock que almacenar, ahora bien hasta para eso hay soluciones. La Gestión de stocks y envíos. A priori cabe pensar que el emprendimiento “en pijama” no es el más indicado para un ecommerce o para un proyecto que mueva mercancía, especialmente si es voluminosa. Sin embargo, hoy en día hay ya opciones que te ayudan a resolver ese problema. Una de las más interesantes es “dropshipping. Llega a un acuerdo con los fabricantes para que sean ellos los que realicen la distribución directa.
Tratamos de reflejar algunos puntos comunes de la actividad laboral desde casa, sin duda, hay muchos otros que dependen de la singularidad de cada emprendimiento.
Fuente: Emprendedores.es